El pueblo egipcio clama contra la traición de su Ejército
Decenas de miles de egipcios se concentraron el viernes en la ´revolucionaria´ plaza Tahrir de El Cairo para exigir a la Junta Militar que devuelva el poder a un Gobierno laico y protestar contra los planes de los militares de arraigar su autoridad en la futura Constitución del país.
La Junta, que tomó las riendas del país después de la dimisión de Hosni Mubarak, pretende promover un documento preliminar a la futura Carta Magna que le otorgue prerrogativas tales como el control del presupuesto y la autonomía del Parlamento y del Gobierno.
El documento contiene 23 puntos que tienen que ser respetados obligatoriamente en la futura ley fundamental del país.
El 28 de noviembre en Egipto se celebrarán las elecciones legislativas, después de lo cual, se formará el Parlamento que se ocupará de la redacción de la nueva Constitución. En cuanto a las elecciones presidenciales, el Ejército evita fijar una fecha concreta e indica que lo antes que podrán llevarse a cabo será a finales de 2013.
Según el movimiento político islamista Los Hermanos Musulmanes, que convocó la movilización de hoy, el borrador del documento propuesto por el vice primer ministro Ali al Salmi "incluye cláusulas que le restan soberanía al pueblo y consagran una dictadura".
Durante las manifestaciones que dieron inicio al fin del régimen de Mubarak los militares desempeñaron un papel clave, negándose a disparar contra los manifestantes y poniéndose de su parte, lo que finalmente obligó al presidente a abandonar su cargo, en el que había permanecido 30 años.
Fue el apoyo del pueblo egipcio lo que llevó al Ejército al poder y parece que la ilusión y la euforia que sentían los egipcios al principio, está dando paso a una gran decepción por culpa, precisamente, de las Fuerzas Armadas.